Guatemala ¿La Elección de emigrar o la alternativa para sobrevivir? / Caja Negra

En un estudio de la OIM se indica que el 70% de las personas conoce los riesgos de migrar, y aun con ello persiste en su decisión, cada año con mayor intensidad. Es evidente que el motivo que impulsa es mayor que su miedo.

Para entender la decisión de los niños migrantes es necesario preguntarnos, ¿por qué se van?  Entre las respuestas que se tienen son:

  1. Búsqueda de empleo
  2. Problemas con pandillas o amenazas
  3. Por la violencia
  4. Reunificación familiar
  5. Discriminación por preferencias sexuales.
  6. Inseguridad

Casi el 50% de los menores lo hace por cuestiones económicas, entonces es idóneo verificar el contexto socioeconómico de guatemala:

Actualmente Guatemala cuenta con 16 millones de habitantes de los cuales 11 millones están en edad de trabajar. La tasa de desempleo es de 2,1% (baja), en EEUU se tiene una tasa de desempleo del 3,8% es decir, más elevada que la de Guatemala; sin embargo, el salario mínimo en EEUU es 400% más elevado que el mejor salario promedio de Guatemala. Actualmente el salario mínimo en EEUU es de $1250 USD y en Guatemala el salario promedio ronda los 1700 a 2700 quetzales mismos que no cubren el costo de la canasta básica (3500 Quetzales). La canasta básica rebasa por mucho el salario promedio esto mantiene al 59% de la población en situación de pobreza de los cuales el 21% se encuentra en pobreza extrema (subsisten con menos de un dolar por dia).

Estos índices de pobreza repercuten de manera directa en el porcentaje de desnutrición crónica de los niños en guatemala donde hay 27 muertes por cada 1000 nacimientos. Al ser insuficientes los ingresos muchas familias no pueden darle educación a sus hijos y en muchos casos los niños trabajan para ayudar a sus familias.

Entonces, bajo este panorama que no solamente implica un mejor salario sino la posibilidad de acceder a la salud, educación y alimentación no resulta raro que entre las causas de porqué eligen migrar se traduzcan en causas económicas.

En Guatemala el 88% de los hogares que reciben remesas son pobres o están en riesgo de caer en la pobreza, la mayoría están encabezados por mujeres; sin embargo las remesas sólo constituyen el 44% de sus ingresos, es decir, el resto lo deben generar ellas mismas y en su mayoría lo generan haciéndose cargo de los campos de cultivo junto con sus hijos.

Tampoco resulta raro que emigren los adolescentes pues en Guatemala las pandillas justamente reclutan a jóvenes de entre los 15-24 años y en este punto se convierte en una situación de persecución pues si se niegan a integrarse los acosan y amenazan.

Otras causas vinculadas a la migración son el aumento de extorsiones (9,5%) secuestros (27%) la percepción de corrupción y el debilitamiento institucional pues alimentan la percepción de inseguridad de manera constante.

En tanto las causas que los impulsan a irse no cambien, los niños seguirán optando por el riesgo de tener una vida mejor y en muchos casos de preservar la vida.

La migración es una consecuencia, debemos dejar de tratarlo como la causa. Solo así podremos generar políticas preventivas y no reactivas.

Cada año se invierten millones de USD en tratar de frenar la migración, lo cierto es que mientras las condiciones que la originan no cambien, la migración seguirá dándose; lo que hace la diferencia en el contexto actual es que  el migrante está cada vez  más expuesto en su intento por cruzar fronteras.

A mayor riesgo, mayor es el costo tanto económico como en la seguridad del propio migrante.

Se sigue optando por EEUU porque es el camino que se conoce, las redes comunitarias ya establecidas son polos de atracción para los nacionales, son el espejo de lo que aspiran y hasta cierto punto se llega a minimizar el riesgo y las consecuencias basadas en las experiencias de los que ya alcanzaron el sueño americano.

Los acuerdos no solo se deben dar como efecto dominó a la securitización de las fronteras, también se pueden dar para diversificar las migraciones, dejar de ver al norte y encontrar acuerdos con los países seculares.

La única forma de rescatar a los niños y con ello el futuro de Guatemala es brindarles igualdad de oportunidades, optar por la educación, el sano desarrollo de los menores, este año el ministerio de educación invirtió el 60% del total de sus recursos en la educación primaria, lo cual es un gran inicio, sin embargo las aulas siguen quedando vacías, es indispensable garantizar el acceso a la educación,  ya que la competencia actual es por talento, al no hacerlo en este sentido cada día estaremos dando un paso atrás.

¿Se imaginan cuál hubiese sido su futuro si en vez de migrar los niños hubiesen tenido la oportunidad de estudiar? la oportunidad de desarrollarse en un entorno seguro?

No todo está perdido, en 1920 Finlandia era de los países con mayor índice de pobreza y delincuencia en Europa, en 30 años lograron cambiar el futuro del país para convertirse en uno de los países con mayor desarrollo, lo lograron cuando enfocaron sus recursos en la educación y el sano desarrollo de los niños.

Guatemala puede convertirse en la Finlandia de América,  rescatemos a los niños para que migrar no sea su única alternativa.

Más importante que las cifras, es lo que está detrás de ellas, los rostros de los niños, las niñas y los adolescentes. A veces, son rostros ocultos, pero siempre son personas con nombre concreto, una historia y con vidas en pleno desarrollo.  (UNICEF)